Las grasas lubricantes suelen ser definidas como compuestos semisólidos o semifluidos y son utilizados especialmente en lugares donde la utilización de un aceite lubricante no sea factible. Están constituidas por un aceite lubricante (entre el 70 al 95%), un espesante (5 a 35%) y aditivos (0 a 10%).

Entre los beneficios que traen las grasas lubricantes encontramos la excelente protección contra el desgaste y la corrosión, la resistencia a altas cargas y presión, y sobre todo su gran adherencia a superficies donde un aceite lubricante no se adhiere.

Para poder mantener y explotar al máximo estos beneficios, a continuación, dejamos estas recomendaciones para cuidar las grasas lubricantes:

1. Correcta selección: hay muchos tipos de grasa, con distintas propiedades y destinadas a distintas aplicaciones. Lo primero que debemos saber es que no hay una grasa para todos, cada vehículo necesita una grasa distinta dependiendo su aplicación.

2. Renovación adecuada: no todas las grasas son compatibles entre sí. Si utilizamos una grasa nueva sobre otra de distinto tipo, puede que ocasionemos una reacción negativa, lo que podrá dañar nuestro equipo a largo plazo.

3. Almacenamiento óptimo: la grasa lubricante es un producto que absorbe la temperatura. Si dejamos una grasa a la intemperie, dependiendo de las condiciones del ambiente, podemos ocasionar un efecto “sangrado” en el que se separa el espesante del aceite base. Este efecto sangrado es irreversible y por más que intentemos repararlo, no tendremos el resultado esperado.

4. Correcta manipulación: uno de los principales errores que se cometen con las grasas es manipularlas con cualquier material. Se suelen utilizar trozos de madera, de metal e incluso cogerlos con nuestras propias manos. Se recomienda utilizar paletas de plástico especiales para evitar la contaminación del producto.

5. Tener en cuenta la aplicación: es importante considerar qué uso le daremos a nuestro equipo antes de comprar una grasa lubricante. Si nuestro equipo trabajará en ambientes húmedos o de lluvias, necesitaremos una grasa resistente al agua. Si nuestro equipo trabajará en un ambiente muy caluroso, necesitaremos una grasa resistente a estas temperaturas. La aplicación de destino es determinante.

Recuerda que en VISTONY contamos con grasas lubricantes para todo equipo y aplicación. Para equipos pesados, para maquinaria industrial, para vehículos livianos, etc. Asimismo, contamos con especialistas a los que podrás consultar y te ayudarán a seleccionar la grasa más adecuada para tu vehículo y sus condiciones de trabajo.

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